Análisis de Just Dance 2020
Salta a la pista de baile con Just Dance 2020, la nueva entrega de la saga que a su vez llega para conmemorar su décimo aniversario.


Just Dance 2020 es un juego de baile en el que podéis disfrutar de 40 canciones de grupos tanto actuales como clásicos, haciendo que sea un título recomendado para todo tipo de públicos e ideal para disfrutarse en compañía. Llega para celebrar los 10 años de la franquicia Just Dance, incluyendo modos para todos los gustos, un registro para ver las calorías que quemamos y la posibilidad de suscribirse al servicio Just Dance Unlimited, que nos da acceso a más de 500 canciones de forma instantánea. Además, Ubisoft ha vuelto a colaborar con varios estudios para dar vida a las canciones, contando siempre con bailarines que nos indican los pasos que debemos seguir.
Lo primero que comprobaréis es que la interfaz es muy parecida a lo visto en el anterior juego, con menús bien organizados, muy claros y cómodos, haciendo que sea muy sencillo seleccionar la canción que queramos bailar al tener también una pequeña vista previa de la misma. Cada canción tiene una dificultad recomendada, así como diferentes extras a desbloquear, estando todo perfectamente indicado. Quizás lo que no nos ha gustado es que aparezcan mezcladas canciones del Unlimited con el resto, haciendo que los que no dispongan del servicio a veces se sientan molestos.
Nada más comenzar os toca crear vuestra Dancer Card, eligiendo un avatar que os represente y poniéndole un nombre. No os procupéis demasiado por la decisión, ya que a la larga podréis modificarla con nuevos avatares, apariencias y alias.
Las mecánicas no han variado respecto a lo visto en entregas pasadas, apareciendo un Profe (con varios a elegir) en la pantalla y teniendo que imitar nosotros sus movimientos como si de un espejo se trataa, los cuales además van apareciendo en forma de pictogramas por la esquina inferior derecha y donde vemos incluso el momento en el que hay que realizarlas. Hay que comentar que lo que más se cuenta es el movimiento de nuestra mano derecha, calificándonos según lo bien que lo hagamos y sumando puntos que nos permiten conseguir estrellas para dicha canción. Como curiosidad, hay un karaoke con el que seguir la letra, aunque no tiene ningún valor a la hora de sumar para la puntuación final. Estas canciones pueden jugarlas cuatro jugadores con la cámara, seis con el móvil (bajando la aplicación Just Controller) o bien cuatro con los controles por movimiento. En general todas las formas funcionan bien, aunque la cámara es más cómoda por no tener que cargar con ningún utensilio. Eso sí, el espacio que se necesita es bastante amplio y siempre tiene que estar bien iluminado.
Un aspecto que nos ha gustado mucho es que se siente una progresión, ya sea quemando calorías u obteniendo experiencia para subir de nivel y mojo que después podemos invertir en la Máquina de regalos para conseguir avatares, títulos y pegatinas con los que personalizar nuestra Dancer Card. También encontraréis bailes alternativos y más exigentes de algunas canciones (aunque para ello antes tendréis que desbloquearlos) y desafíos diarios que proporcionan más mojo. Según las estrellas obtenidas, mejor es el premio, pudiendo incluso grabar parte de nuestra actuación a través de Autodance para después compartirla en redes. El nivel se conserva de juegos anteriores y podréis incluso desbloquear algún que otro extra por haberlos jugado.
Encontraréis un total de 40 canciones, algunas con una versión cuyo baile se complica notablemente, con temas virales en la actualidad, de artistas emergentes, grandes clásicos e incluso familiares. En general se trata de una buena lista y muy variada, si bien no todas las canciones se encuentran al mismo nivel, teniendo cada una de ellas una determinada dificultad. Al menos siempre tenéis la opción de suscribiros a Just Dance Unlimited, que añade más de 500 canciones al repertorio de forma instantánea. Podéis comprar una de un día, un mes, tres meses o un año, aunque con cada copia del juego se incluye un mes gratis para probar el servicio y ver si es algo pensado para vosotros.
En cuanto a modos de juegos tenemos tres disponibles. El primero de ellos es el clásico Just Dance, en el que disfrutar de la canción que queramos eligiéndola individualmente o a través de una playlist para intentar batir records, o donde también podemos participar en el World Dance Floor para intentar superar desafíos como torneos, eventos temáticos, batallas grupales o combates contra jefes entre otros, además de poder disfrutar de algunas canciones de Unlimited temporalmente y sin coste alguno. Como siempre, es muy entretenido y pasaréis muchas horas para intentar superaros a vosotros mismos mientras desbloqueáis nuevos coleccionables. Además siempre podéis activar el modo Sweat para ver las calorías que estáis quemando o el modo cooperativo para combinar las puntuaciones de los jugadores y superar a otras parejas.
Junto a este modo tenemos Kids, donde las coreografías resultan mucho más sencillas y se tiene un sistema de calificación más permisivo al estar pensadas para los más pequeños de la casa. Hay ocho canciones nuevas para ellos, aunque en esta ocasión no podréis tener acceso a las de Disney si no estáis suscritos Just Dance Unlimited. Al menos hay una opción llamada Sin Parar que permite jugar varias canciones en un orden aleatorio.
Por último, y como gran novedad de esta entrega, está All Stars, que nos lleva a participar en algunas de las canciones más famosas de toda la saga para alcanzar el final de un camino y así obtener una canción exclusiva. Nos hubiera gustado encontrar algo más elaborado al conmemorar los diez años de la saga, pero se agradece poder jugar algunas canciones que no vienen en la lista del juego principal.
Del apartado gráfico poco podemos decir que no sepáis ya, contando con unos menús muy coloridos llenos de efectos que los hacen muy llamativos, vídeos creados para la ocasión con fondos vistosos y bailarines muy originales a los que siempre es un placer ver en movimiento. En el sonoro, como no podía ser menos, tenemos melodías de todo tipo que llegan a un amplio público, lo que a su vez conlleva que las letras de algunas canciones hayan sido censuradas.
En definitiva, Just Dance 2020 sigue siendo un gran referente dentro del género y, aunque pensamos que le falta algo de innovación, os hará pasar grandes momentos en compañía. La lista de canciones es muy variada (con algunos temas disparatados), ofreciendo un desafío a la altura incluso para los más experimentados. Además, siempre es un placer observar nuestros progresos, ya sea desbloqueando nuevos estilos de baile para las canciones o, simplemente, quemando calorías. Los extras por el décimo aniversario están bien, pero echamos de menos poder jugar a todas las canciones del modo All Stars en el Just Dance principal.
Si te gusta bailar no tengas dudas, ya que el juego ofrece un sistema muy intuitivo que enseña incluso a aquellos que no son demasiado hábiles, siendo ideal además para organizar fiestas con amigos.