Análisis de Persona Q2 New Cinema Labyrinth
Un mundo de película os aguarda en Persona Q2: New Cinema Labyrinth, donde los Ladrones Fantasma deben desentrañar un nuevo misterio.


Persona Q2: New Cinema Labyrinth es un spin-off de la saga Persona y secuela de Persona Q: Shadows of the Labyrinth, aunque no estén demasiado relacionados más allá del género al que pertenecen y algunos detalles de la historia. Una vez más estamos ante un RPG de mazmorras donde, en esta ocasión, contamos con personajes de Persona 3 Portable y Persona 5, además de regresar algunos del anterior juego.
Su argumento nos pone en el papel de los personajes de Persona 5, los cuales se encuentran en peligro tras perder el control sobre el vehículo de Morgana mientras viajaban a través de los Mementos. Ahora se encuentran en un espacio misterioso, en una ciudad desconocida y extraña llena de oponentes que nunca habían visto. Para intentar escapar con vida, huyen hacia un cine sin salida. Una vez allí se encuentran con Nagi, una mujer que viste de forma elegante, y con Hikari, una chica tranquila y reservada, las cuales les infoman de que acaban de salir de una pantalla de cine. Ahora toca descubrir los secretos de este laberíntico lugar, todo mientras son guiados por otros portadores de Persona e intentan escapar del misterioso cine.
Esta trama nos ha gustado bastante, está bien narrada y nos permite ver de nuevo a los carismáticos personajes de la franquicia. De vez en cuando veréis alguna escena animada de gran calidad que os dejará embobados mirando a la pantalla. No es necesario haber jugado a la anterior entrega, pero si es recomendable conocer los juegos que aquí se tratan al mencionarse algunos detalles de los mismos. Lo que más nos ha gustado es encontrar montones de referencias al cine, incluyendo incluso armas basadas en películas famosas. Eso sí, comentar que todos los textos del juego nos llegan en inglés, exigiendo un buen nivel para comprenderlo todo.
Nada más comenzar podréis elegir entre cinco niveles de dificultad: Safety, Easy, Normal, Hard y Risky. Están pensadas para todo tipo de jugadores, con una mayor o menor exigencia a la hora de combatir y en otros aspectos, aunque si seleccionamos la más alta no podemos cambiarla a lo largo de la aventura.
En cuanto a mecánicas, funciona de manera similar a lo visto en la anterior entrega. Aquí nos desplazamos por un mundo dividido en casillas desde una pespectiva en primera persona, contando en la pantalla inferior con un mapa que poco a poco vamos dibujando o bien que se crea solo si activamos la opción de auto completar. También es posible viajar automáticamente si trazamos una línea por el camino que queremos seguir. Al andar vemos cómo una cuenta atrás nos indica el nivel de peligro que tenemos de ser atacados por enemigos, además de poder ver caminando a los más poderosos.
Una vez comienzan las batallas llevamos hasta cinco personajes, los cuales pueden cambiar su posición en el terreno para sacar ventaja de sus habilidades únicas, luchar o escapar. Si optamos por combatir, tenemos a nuestra disposición los movimientos de cada protagonista, así como la posibilidad de defenderse y utilizar objetos. Cada uno cuenta con una barra de vitalidad y otra que determina el número de magias que podemos gastar. Utiliza el mismo método que la saga principal, donde debemos ver el tipo de enemigo al que nos enfrentamos para intentar dañarlo con elementos a los que sean débiles y así sacar provecho de la situación. Si conseguimos acertar con un ataque al que sean frágiles, podemos tumbarlos y conseguir un impulso que nos permite lanzar ataques que gastan SP sin consumir ninguno. Además, al tumbar a todos los oponentes podemos lanzar un ataque grupal (All-Out Attack) que daña enormemente a todos los rivales y que nos proporciona algunos extras si acabamos con todos utilizándolo, como materiales raros.
Llegado el momento, cada miembro del equipo tiene acceso a un Sub-Persona intercambiable para poder activar sus habilidades. Esto hace que las capacidades estratégicas se amplíen enormemente al poder adaptarnos así a las características del enemigo al que nos enfretamos. Además podemos fusionarlos con otros y mejorarlos.
Hay enemigos de todo tipo, siendo sacados en su mayoría de otras entregas de la saga, con sus propias ventajas y debilidades. De vez en cuando aparecen algunos dorados que, al derrotarlos, nos ofrecen fabulosas recompensas, aunque ya os avisamos de que no es nada sencillo acabar con ellos, recomendando siempre analizarlos antes de realizar algún movimiento.
Al ganar combates obtenemos dinero, objetos y experiencia con la que nuestros protagonistas pueden subir de nivel y mejorar sus estadísticas generales, pudiendo incluso aprender nuevos movimientos especiales. Además, si queréis es posible activar los combates automáticos para que sea menos pesado subir de nivel. Un detalle importante es que nuestro inventario es limitado, teniendo que administrar los objetos que llevamos según la situación a la que nos enfrentamos.
La exploración sigue siendo tan importante como en otros juegos del género, con escenarios llenos de rutas, secretos, trampas y enemigos a derrotar. No están tan conseguidos como en otros juegos pero, aún así, sigue siendo un placer recorrerlos. Como curiosidad, si completamos un mapa al 100%, podemos abrir un tesoro dorado que contiene jugosas recompensas. La porción explorada aparece en la esquina superior derecha de la pantalla táctil, aunque si lo preferimos podemos usar una rara moneda del juego.
La sala del cine nos sirve como base desde la cual acceder a la tienda para comprar, vender y organizar equipamiento (tales como amas, armaduras y accesorios) u objetos, grabar la partida o para viajar hasta los mundos de las películas disponibles. También podemos ir hasta la Sala de Terciopelo, lugar en el que nos esperan Caroline y Justine, quienes nos ayudan con los Sub-Personas.
En cuanto a duración, tenemos aproximadamente para unas 60 horas de juego. A todo ello hay que sumarle la rejugabilidad que ofrece por tener diferentes dificultades y muchos secretos a descubrir, así que tenéis juego para rato.
El apartado gráfico del juego no está nada mal para tratarse de un RPG de mazmorras. Los escenarios son amplios y están bastante detallados, mientras que los personajes, al estilo super deformed, son muy fieles a los originales, cuentan con buenos modelados, expresiones y se dejar ver en los combates cuando realizan sus ataques más poderosos. Lo que más nos ha gustado es la interfaz, que es tan vistosa como en la saga principal y cuenta con transiciones hasta los combates realmente buenos. Prescinde de efecto 3D, lo que le ha permitido ser algo mejor.
Pero lo que de verdad nos ha encantado es su banda sonora, con temas perfectamente reconocibles por los fans de la franquicia, remezclados para la ocasión y de una calidad soberbia. Las voces nos llegan en japonés, estando perfectamente interpretadas por sus respectivos dobladores, mientras que los textos, como hemos comentado, llegan en inglés.
En definitiva, Persona Q2: New Cinema Labyrinth mejora todo lo visto en el anterior juego, con una historia divertida en la que es un placer ver interactuar a diferentes personajes, desafiantes y estratégicos combates que nunca os cansaréis de repetir y muchos elementos de gestión para volverlo aún más profundo. Es cierto que se trata de un título más pensado para los aficionados a la franquicia principal, pero si os atrae el género seguro que no os arrepentiréis.
Un juego tan largo como entretenido que recomendamos a los amantes de los RPGs de mazmorras, especialmente si os llama mucho la atención la saga principal de Persona.