Análisis de Senran Kagura Peach Ball
Las shinobis más sensuales del mundo de los videojuegos regresan en Senran Kagura Peach Ball, un nuevo spin-off de la franquicia.


Senran Kagura Peach Ball es un juego de pinballs en el que las shinobis vuelven a ser el eje central de la aventura. Nuestro objetivo es bien sencillo, utilizar los flippers de la máquina para golpear la bola y que ésta a su vez impacte sobre las chicas para que poco a poco vayan recuperándose, todo mientras vamos descubriendo los secretos de cada mesa, intentamos obtener la mayor puntuación y vamos desbloqueando nuevos objetos.
La historia del juego se centra en la nueva invención de Haruka, una medicina de transformación llamada Kemonar que permite a las chicas transformarse en adorables animales. Ahora, para que todo vuelva a la normalidad, debemos usar una misteriosa Peach Ball, encajando todo casualmente dentro de una máquina de pinball que nos permite golpearlas hasta que recuperen su forma original.
No es una trama que llame especialmente la atención, sirviéndo simplemente como excusa para tener que utilizar los pinballs y golpear a las chicas con las bolas mientras emiten ruidos sensuales y, al desaparecer los efectos del Kemonar, queden completamente desnudas (si bien no se muestra realmente nada). Además todos los textos están en inglés o francés, lo que dificulta el acceso a algunos jugadores a pesar de ser bastante sencillo. Al menos todo es contado mediante escenas que podréis saltar si no os interesa.
Los controles son los propios de los pinballs, donde podemos mover los flippers para golpear la bola en la dirección que deseemos, usar un muelle para sacar dicha bola cuando hemos perdido otra o agitar la mesa en caso de urgencia si vemos que va a caer por un hueco no deseado. Pero cuidado, tened en cuenta que la mesa sólo se puede agitar una vez cada cierto tiempo, no dejando aquí hacerlo cuando queramos y que nos señalen falta como en otros juegos similares. También contamos con la posibilidad de usar objetos y cambiar la perspectiva.
A la derecha de la pantalla podréis ver todas las Misiones Peach disponibles, las cuales harán que consigáis puntos normales y de tipo Peach para alcanzar mayores objetivos. Al activar ciertos trucos o golpear lo suficiente a la chica determinadas veces, se volteará y cambiará de posición, entrando entonces en la fase After Break para golpearla en ciertas zonas y obtener puntos extra.
Si conseguimos acumular los suficientes Puntos Peach viajamos hasta fases de bonus conocidas como Desafío Sexy, donde aparecen varias bolas de forma simultánea para golpear a los diferentes objetivos que aparecen y conseguir así más puntos. Si alcanzamos por tercera vez el máximo de los Puntos Peach entramos al Súper Desafío Sexy, en el que utilizamos los flippers para que la bola alcance a la chica en cuestión y que poco a poco se excite, acabando el nivel cuando finaliza esta fase.
Tener que ir cumpliendo desafíos es bastante divertido en general, pero echamos en falta una mayor cantidad de personajes y mesas, siendo además las dos bastante parecidas entre sí en cuanto a estructuras. Esto hace que al poco tiempo se haga repetitivo, pero al menos lo compensa con su gran cantidad de desbloqueables en forma de objetos.
En cuanto a modos de juego, el principal vuelve a ser el Modo Historia. Aquí elegimos el escenario de una de las cinco chicas (desbloqueándose el resto de fases al jugar al menos a una), en el que se nos va contando la trama a través de varias escenas y hay que completar ciertos objetivos si queremos avanzar. Si os resulta complicado siempre podéis activar el Modo Asistente, que hace que tengáis ocho bolas en reserva y recibáis la ayuda de Bebeby, la cual pateará cualquier bola que caiga por los huecos laterales. Es bastante entretenido y, si cumplís todos los objetivos de un nivel, conseguiréis objetos a utilizar en el Modo Diorama.
Por otro lado tenemos el Modo Libre. En este lugar podemos elegir una mesa y los personajes que queramos con el único objetivo de conseguir la mayor puntuación posible. Eso sí, al llegar al Súper Desafío Sexy, de manera aleatoria aparecerá el Súper Desafío Sexy Secreto para que podamos obtener nuevos trajes, accesorios o bolas al cumplir sus objetivos.
Como siempre, no podía faltar el Vestidor, donde podemos personalizar el aspecto de las chicas, interactuar con ellas o hacer que posen en diferentes posiciones y fondos junto a los objetos desbloqueados para después sacar instantáneas. Junto a éste está la Tienda, en la que comprar nuevas bolas y trajes con el dinero conseguido, renovando sus artículos cuanto más jugamos, y la Galería, donde disfrutar de las escenas, ilustraciones o la música que hemos desbloqueado jugando o comprándolas en la tienda.
La duración del juego no es muy extensa, pero al tener tantos desbloqueables se alarga su vida considerablemente. Además es muy rejugable por intentar siempre superar las marcas, llegando nuevos contenidos en un futuro mediante DLCs.
El apartado gráfico cumple gracias al colorido del que hace gala, con buenos diseños de personajes, escenarios detallados y efectos conseguidos. Quizás hemos echado en falta más elementos en la mesa, ya que al poco tiempo habréis visto todas las partes de las que se componen. Además las físicas no son demasiado realistas, aunque no funcionan del todo mal dentro del juego.
El sonoro, sin ser espectacular, cuenta con melodías variadas, muy alegres y movidas que le sientan genial a nuestras partidas, siempre acompañadas de efectos trabajados. Las voces nos llegan en japonés, siendo éstas de bastante calidad, mientras los textos, como hemos comentado, están tanto en inglés como en francés.
Senran Kagura Peach Ball es, como conclusión, un título que entretiene por tener buenas mecánicas jugables y montones de desbloqueables a conseguir. Es una pena que no se haya aprovechado la ocasión para meter más mesas y personajes, ya que a las pocas partidas veréis que se vuelve repetitivo. Al menos siempre es un placer intentar completar objetivos y superar puntuaciones. Eso sí, comentar que más contenidos llegarán al juego mediante DLCs.
Un título pensado para los seguidores de los personajes de Senran Kagura, a los que puede echarles para atrás el tener tan pocos personajes a pesar de mantener toda su sensualidad.