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Análisis de YS Origin

Tras su paso por PC, llega a PlayStation 4 y PSVita la precuela de la primera entrega de la saga Ys, Ys Origins. Descubre el enorme mundo de este clásico RPG que mezcla la acción con las plataformas.

Cartel YS Origin Interior
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Su historia tiene lugar 700 años antes de los acontecimientos de Ys I y II, donde había hace tiempo una tierra próspera y salvaje llamada Ys gobernada por las Diosas gemelas, Reah y Feena, y sus seis sacerdotes. Era un verdadero paraíso, donde todos sus habitantes eran capaces de hacer milagros a voluntad a través del uso de la magia – un poder que les otorgaba un artefacto conocido como la Perla Negra.

Un día, sin advertencias, enormes demonios llegaron al lugar, trayendo la muerte y la devastación a su paso. Su número y poder eran demasiado para los caballeros y hechiceros de Ys, por lo que la gente buscó refugio dentro de su santuario más sagrado en la cima de la montaña más alta. En un intento desesperado por mantener a estas personas a salvo, las Diosas gemelas usaron el poder de la Perla Negra para arrancar este templo del suelo y llevarlo hasta el cielo, lejos de una amenaza cada vez mayor.

Sin embargo, los demonios estaban decididos. Erigieron una enorme torre desde la que lanzaron nuevos ataques, llevando la batalla a los cielos. Una guerra total había comenzado, con fuerzas concentradas en el Santuario de Salomón y la Torre del Diablo. Y fue en medio de este caos donde las Diosas gemelas desaparecieron en la noche. Nadie fue informado de su partida, ni siquiera los Seis Sacerdotes que les sirvieron. Parecía claro que habían vuelo a la superficie, pero nadie sabía exactamente el por qué. Sólo había una certeza: sin las Diosas, Ys no podría sobrevivir.

Con la intención de encontrar a sus deidades desaparecidas, los Seis Sacerdote organizaron un grupo de búsqueda con la más alta élite de caballers y hechiceros de la tierra. A estos soldados se les dio una sola misión: asegurar la seguridad de Reah y Feena y traerlas de vuelta al Santuario de Salomón en buen estado. Pero en los desolados y arruinados restos de Ys, sólo hay un lugar al que podrían haber ido… la propia Torre del Diablo.

Ys Origin es un RPG de acción con partes de plataformeo y mucha exploración. Contamos con tres personajes jugables, cada uno con sus propios movimientos y aptitudes para el combate, así como multitud de puzles a resolver y poderosos enemigos a derrotar.

Nada más comenzar se nos da a elegir entre uno de los dos personajes: Yunica Tovah, una aprendiz de caballero que se especializa en el uso de un hacha para realizar ataques de medio alcance, o Hugo Fact, un mago ideal para los ataques a larga distancia. Al completar el juego además tenemos acceso a The Claw (la garra), también especializado en ataques a corta distancia pero siendo muy veloz. Cada uno de ellos cuenta con su propia historia única y un estilo de juego completamente diferente, lo que asegura montones de horas de juego, mucha variedad en su desarrollo y rejugabilidad. Para conseguir ver el final verdadero tendremos que completar el juego con The Claw - donde lucharemos con un poderoso nuevo enemigo -. A todo ello hay que sumarle skins adicionales y otros secretos que se consiguen en otras modalidades.

Para adaptarse a todo tipo de jugadores contamos con varios niveles de dificultad: Fácil, Normal y Difícil. El mayor cambio lo notaréis en el daño que realiza nuestro grupo, siendo mayor cuanto menos dificultad elegimos.

Su jugabilidad es una delicia, manejando libremente al personaje seleccionado por escenarios mientras acabamos con los enemigos esquivando sus embestidas y ataques, y exploramos a fondo cada rincón para intentar encontrar solución a los puzles que nos proponen. Estos puzles son bastante complejos en determinados momentos y nos hacen recorrer montones de salas hasta dar con la solución. Debido al parecido de algunas zonas a veces es fácil desorientarse, por lo que hay que prestar mucha atención a los detalles. De vez en cuando entran también en juego las zonas de plataformeo, que nos obligan a saltar con precisión y ejecutar alguna que otra habilidad especial si queremos alcanzar nuestro destino o conseguir determinados tesoros.

Al luchar contamos con ataques normales y habilidades que podemos combinar con saltos para realizar grandes daños. Estas habilidades son muy útiles y gastan MP, pero se recargan en poco tiempo. Cuando luchamos, poco a poco se va rellenando un indicador que al llegar al 100% nos permite activar el Modo Potenciación, con el que realizamos más daño atacando normal o con habilidades – teniendo éstas la mitad de coste de MP – y recibimos sólo la mitad de daño.

Desde el inventario podemos equiparnos armas, piezas de armadura, botas y accesorios, además de diversos objetos con habilidades que conseguimos a lo largo de nuestro viaje. Todos pueden subir de nivel al cumplir ciertos requisitos, haciendo que ganemos fuerza de ataque, una mayor defensa o que los efectos de las habilidades sean mejores.

Los enemigos son variados y cuentan con patrones de ataque bien diferenciados, pero en general suele ser bastante fácil derrotarlos. Todos tienen puntos débiles a explotar, siendo vulnerables a veces a nuestros ataques. Hay algunos a los que les rodea un extraño aura que esconden secretos, por lo que derrotarlos se vuelve vital si queremos avanzar o conseguir jugosos extras.

El verdadero reto llega con los jefes finales, cuyos movimientos están más trabajados y cuentan con mucha vitalidad dividida en secciones. Al terminar con una de estas secciones su patrón de ataque varía por completo, teniendo que buscar la mejor estrategia para acabar con ellos.

Cuando derrotamos a los enemigos obtenemos experiencia con la que subir de nivel - y en consecuencia mejorar las estadísticas generales de nuestro personaje -, objetos con estados beneficiosos temporales y otros de curación. Dichos útiles curativos son muy importantes, ya que sólo se usan al cogerlos y no podemos llevarlos equipados para utilizarlos cuando queramos.

Llevamos encima un cristal con el que purificar las estatuas demoníacas, transformándolas así en estatuas de diosa. En estas estatuas recuperamos completamente nuestra salud, además de poder guardar nuestro progreso y poder viajar entre las que hayamos activado para ahorrarnos grandes caminatas.

Los escenarios son amplios aunque se repiten en exceso por zonas, con multitud de salas y secretos escondidos en ellos. Están cargados de cofres con mecanismos ocultos para abrirlos, elementos a destruir y montones de enemigos esperando en cada rincón. Están muy bien diseñados y nuestra precisión con los mandos es fundamental cuando las trampas entran en juego.

Además contamos con los modos de juego desbloqueablesTime Attack”, “Bosh Rush” y “Modo Arena”, que pondrán a prueba toda vuestra destreza con los mandos y proporcionan jugosas recompensas.

En cuanto al apartado gráfico, estamos ante un título de corte clásico remasterizado para la ocasión en el que sobre todo destacan sus diseños. Tenemos personajes creados y animados mediante sprites, mientras que los jefes y los escenarios  son completamente tridimensionales, aunque distan mucho de lo que se espera de un título actual. Ahora contamos con gráficos en alta resolución y se ha adaptado a las pantallas panorámicas. Lo mismo podemos decir de las escenas de estilo anime, que a pesar de haber cambiado el formato se ven un tanto borrosas.

La banda sonora es bastante buena y acompaña bien durante la aventura. Los efectos de sonido también cumplen. Las voces sólo están presentes en ciertas escenas, estando en general representadas mediante cuadros de diálogo. Un detalle importante es que ahora sus textos nos llegan completamente en castellano, aunque sí es cierto que hemos encontrado algunas erratas en la traducción.

Ys Origin nos ha sorprendido muy gratamente, con un toque retro que gustará a los amantes del género. La historia, a pesar de ser simple, está bien llevada, mientras que su jugabilidad es una auténtica delicia y está bien diferenciada para los tres personajes. A todo ello hay que sumarle su extensa duración, con multitud de secretos a descubrir y muchos modos de juego a desbloquear que añaden aún más extras.

Si os gustan los RPG de acción clásicos japonenes y sois fans de la franquicia no deberíais dejarlo pasar, siempre y cuando su estética no os eche para atrás.