Vídeo análisis de Caveman Warriors
Eastasiasoft y JanduSoft lanzan Caveman Warriors para PlayStation 4, Xbox One, Switch y PC, un juego de plataformas y acción cooperativa al que le dedicamos nuestro análisis.


Su historia es muy simple, y nos habla sobre un grupo de valientes cavernarios que se unen para salvar al mundo de una malvada invasión alienígena, los cuales han secuestrado a los más jóvenes integrantes de la tribu. Hay varios giros argumentales a lo largo del juego, estando contada mediante imágenes en forma de cómic, aunque en general deja bastante que desear.
Caveman Warriors es un juego de acción y plataformas de desplazamiento lateral que puede ser disfrutado tanto en solitario como en compañía, teniendo más peso en la aventura la colaboración entre jugadores. Si participan cuatro de forma simultánea cada uno maneja a un personaje, aunque si el número es menor podemos alternar entre ellos en cualquier momento.
Sus controles funcionan y responden bastante bien, con un botón de salto, otro para atacar y dos para utilizar los movimientos especiales. Nuestros protagonistas no saben nadar, por lo que caer al agua o al vacío nos resta vitalidad, apareciendo entonces sobre una plataforma para que podamos continuar nuestro viaje. El desarrollo de la aventura no se limita sólo a estas acciones, ya que encontramos fases en las que controlamos a triceratops o aviones evitando obstáculos y disparando para progresar gracias al uso de unos portales temporales.
Existen cuatro personajes diferentes, cada uno con una serie de habilidades únicas que debemos aprovechar si queremos avanzar en el juego. Liliana puede arrojar lanzas para acabar con los enemigos o utilizarlas como base al clavarlas en ciertas paredes; Moe usa un mono para distraer a los guardias; Jack con su corpulencia derriba muros; y Brienne es una gran guerrera que repele los ataques enemigos con su blindaje. Todos tienen dos tipos de movimientos especiales de los que no hay que abusar, además de contar con una vitalidad que comparten los personajes de un mismo jugador.
Contamos con una barra de vitalidad y otra de estamina, gastando cada movimiento especial un porcentaje de la misma para que tengamos que utilizarlos con cabeza. La vitalidad puede recargarse al conseguir objetos de los enemigos caidos, mientras que la de estamina lo hace con el paso del tiempo. También hay un número limitado de vidas que, si se agotan, nos obligan a comenzar el nivel desde el principio.
Hay enemigos variados y con patrones de ataque diferenciados que nos toca aprender para acabar con ellos fácilmente. Podemos derrotarlos atacándoles o bien saltando sobre ellos tras un número determinado de golpes, siendo mejor unos personajes que otros dependiendo del rival. Pero lo mejor son los combates contra los jefes finales, cuyos movimientos son más complejos. Al derrotarlos podemos seguir golpeándoles durante un tiempo limitado para conseguir extras y sumar puntos.
Los niveles están bien diseñados, ofreciendo diversidad y puzles simples que no tardaréis en resolver, estando siempre relacionados con las diferentes habilidades de los protagonistas. Estos esconden trampas que debemos evitar para no recibir daños y coleccionables en forma de pilas que, si recogemos en la cantidad necesaria, nos permiten viajar a nuevos mundos a completar.
Su duración no es demasiado extensa, con ocho niveles principales a completar que, eso sí, os llevarán algo de tiempo por su bien ajustada dificultad. Ésta se ve ampliada considerablemente si sumamos las fases ocultas y nos dedicamos a buscar todos los coleccionables, siendo bastante rejugable por ello y la nueva dificultad que se desbloquea tras completar la aventura.
En el apartado gráfico estamos ante un juego bidimensional que, a pesar de quedar bastante lejos de otros títulos actuales, cumple sobradamente con su cometido. Los personajes están bien recreados y animados, siendo los escenarios algo irregulares, en los que el fondo afea el resultado. Cabe mencionar que no se resiente en ningún momento y que la cámara está muy bien situada, ofreciendo siempre el mejor ángulo para visionar la acción.
Las melodías resultan un tanto monótonas, aunque concuerdan a la perfección con la temática del juego. Junto a ellas tenemos buenos efectos de sonido y la posibilidad de elegir entre varios idiomas de subtítulos para los escasos textos, entre los cuales se encuentra el castellano.
Caveman Warriors ofrece diversión sin muchas complicaciones, con un buen diseño de niveles, una dificultad bien ajustada y varios personajes que debemos dominar para saber sacar provecho a sus habilidades. Es un juego que claramente está enfocado al cooperativo, pero no por ello deja de ser disfrutable en solitario. Quizás echamos en falta algo más de originalidad, una historia mejor elaborada y un apartado gráfico a la altura, pero en general nos ha gustado.
Aquellos que busquen una buena experiencia cooperativa encontrarán un producto bastante completo, aunque pensamos que con un poco más de dedicación podría haberse conseguido algo más redondo.