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Vídeo análisis de Hyrule Warriors: Definitive Edition

Los guerreros más famosos del universo de Zelda se preparan para la batalla en Hyrule Warriors: Definitive Edition, una nueva versión del juego para Nintendo Switch que incluye más contenidos y mejoras.

Cartel Hyrule Warriors Definitive Edition
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Hyrule Warriors: Definitive Edition es un juego de acción de estilo musou en el que, controlando a diversos personajes de la saga The Legend of Zelda, tenemos que acabar con montones de enemigos.Debutó en primer lugar en Wii U para posteriormente llegar a Nintendo 3DS con más contenidos y ajustes en su jugabilidad, pero con un consecuente descenso en su calidad gráfica que hacía que no fuera la mejor opción. Ahora aterriza en Nintendo Switch, mejorando aspectos como el rendimiento y con diversos contenidos extra que hacen que se sienta como la versión definitiva.

Su historia nos lleva hasta el Castillo de Hyrule, donde la princesa Zelda y el comandante Impa observan el entrenamiento de sus soldados. De repente, un estruendo los alerta de la llegada deun ejército oscuro que avanza hacia el lugar. Rápidamente, tanto Zelda como Impa, salen a plantarles cara, así como Link, quien se siente incapaz de mantenerse al margen de esta guerra. Durante el encuentro con un poderoso enemigo, la Trifuerza del Valor despierta dentro de Link, salvando su vida y también la de Impa, quien lo reconoce como el héroe elegido de Hyrule. Tras una larga batalla, Link y las fuerzas de Hyrule expulsan a los invasores, pero con una inesperada consecuencia, la princesa Zelda ha desaparecido. Con el objetivo de encontrarla, Link e Impa salen a su encuentro, teniendo que recorrer tres Hyrules diferentes del pasados para reclutar a guerreros de cada mundo y así revelar la causa del caos que aflige al reino y devolverle la paz.

El argumento no está nada mal a pesar de ser bastante previsible, incluyendo esta versión de serie, como ya ocurriera en Nintendo 3DS, ramificaciones que nos permiten conocer las historias de otros personajes, tales como Linkle o Toon Link. Lo mejor es poder ver de nuevo a algunos personajes en acción que harán las delicias de los seguidores de la franquicia.

Los controles no han variado demasiado, teniendo un botón de ataque normal, otro fuerte, la posibilidad de esquivar, utilizar un ataque especial al rellenar un medidor o potenciar temporalmente las habilidades del personaje al utilizar otro. Por su parte, uno de los añadidos que se incorporó en la versión portátil y que está presente en ésta es la posibilidad de cambiar entre personajes en medio de una batalla, haciendo que sea más ágil y divertido planear estrategias cuando lo damos órdenes a nuestros compañeros. El objetivo es muy sencillo, cumplir con las misiones que nos encomiendan mientras conquistamos bases enemigas para obtener ventaja.

A la hora de combatir, otro de los elementos que influye es el tipo de arma que llevamos equipado, cambiando ésta completamente el estilo. Estas se pueden mejorar y se consiguen a lo largo de la aventura al abrir cofres y, sobre todo, de los enemigos caídos. Por otro lado, los artilugios que tantas veces hemos visto a lo largo de la saga están perfectamente integrados, tales como las bombas, el arco, el bumerán o incluso la ocarina entre muchos otros, teniendo un gran peso a la hora de resolver puzles por los escenarios y cuando nos enfrentamos a los poderosos jefes finales.

Cuando derrotamos enemigos conseguimos experiencia con la que subir de nivel a nuestros personajes, rupias para comprar diversos objetos, armas e incluso materiales, muy útiles para mejorar a los protagonistas. Un ajuste que nos ha gustado mucho y nos ahorra bastante tiempo es que al viajar hasta la tienda podemos invertir las rupias conseguidas en subir de nivel al resto del grupo o comprar objetos en el modo aventura. Por su parte, los materiales los podemos invertir en un completo árbol de habilidades de cada personaje para crear insignias, volviéndose así poco a poco más fuertes.

Lo mejor de este juego es lo bien incorporados que están los elementos de la saga, tales como los puzles, los artilugios o los jefes, que resultan bastante más complejos que los de otros títulos del mismo género. Todo ello hace que se sienta más complejo y profundo, convirtiéndose a la larga en mucho más entretenido.

En cuanto a modalidades vamos bien servidos. En primer lugar tenemos Leyenda, que viene a ser la historia del juego dividida en capítulos con varias ramificaciones. A continuación está el típico modo Libre, donde podemos rejugar estas fases con el personaje que nosotros queramos. Aventura nos lleva hasta un mapa cuadriculado en el que desbloqueamos caminos al completar misiones, siendo un lugar interesante para obtener buenos objetos e incluyendo Hadas que nos ayudan en combate y que se pueden personalizar. Por último está Desafío, que nos propone los retos más complicados de todo el juego.

No hay que olvidar que vuelve el modo cooperativo a pantalla partida, pudiendo utilizar ahora cada jugador un Joy-Con y completar el viaje juntos. Se echa en falta el cooperativo online, pero en general nos ha gustado que se vuelva a apostar por jugar en compañía.

La duración del juego es tremendamente extrensa, sobre todo si queremos completar todas las tareas secundarias, mejoramos a los 29 personajes jugables y conseguimos todas sus armas. A ello hay que sumarle las Skulltulas doradas, que nos permiten conseguir fragmentos de un cuadro que al rellenarlo ofrece jugosas recompensas, o los corazones para mejorar nuestra vitalidad, así como la compatibilidad con los amiibo para desbloquear recompensas diarias.

En el apartado gráfico el único cambio que hemos encontrado respecto a la versión de Wii U es el aumento de resolución, que en sobremesa pasa de los 720p a los 1080p. En el resto sigue siendo muy similar, con personajes bien modelados y animados, escenarios amplios y buenos efectos. Es una pena que no se haya aprovechado la ocasión para mejorar los problemas de popping, algunas texturas y, sobre todo, el rendimiento del juego, donde encontraréis algunas caídas de fotogramas puntuales, aunque con menos presencia que en Wii U. Al menos se ha mejorado el del cooperativo, que funciona con algo más de fluidez.

El sonoro sigue siendo el mismo, con canciones de gran calidad entre los que encontraréis temas nuevos y otros clásicos de la franquicia remezclados para la ocasión, efectos estupendos fácilmente reconocibles por cualquier fan que se precie y, para no perdernos ningún detalle, textos en castellano.

Hyrule Warriors: Definitive Edition, como conclusion, coge lo major de las entregas de Wii U y 3DS para combinarlas y traernos la versión definitiva. Incluye los gráficos de Wii U pero con una mayor resolución y todos los contenidos que pudimos ver en la portátil, con algunos ajustes que hacen que todo resulte más placentero. Es cierto que las novedades escasean, encontrando sólo un par de trajes nuevos extraídos de Breath of the Wild, pero en general no es un título al que le hagan falta más añadidos por su extensa duración.

Un spin-off que los fans de la franquicia sabrán apreciar, pudiendo ahora disfrutarlo en cualquier lugar gracias a las posibilidades de Nintendo Switch.