Vídeo análisis de Kingdom Come Deliverance
Warhorse Studios nos traslada hasta la era medieval con Kingdom Come Deliverance, un juego de rol muy profundo, realista y ambicioso que tiene lugar en un enorme mundo abierto lleno de actividades. Adéntrate en su mundo con nuestro análisis.


Su historia nos traslada hasta el año 1403, en el que el Reino de Bohemia vive una época convulsa por el fallecimiento del gran rey Carlos IV. Debido a este suceso, su hijo Wenceslao IVtoma el poder pero, por su incapacidad para gestionar el reino, los nobles deciden dar su apoyo al hermano de éste, Segismundo. Con el fin de llegar al poder, Segismundo decide secuestrar a Wenceslao y hacerle abdicar, imponiéndole un duro castigo a aquellos que lo apoyen y provocando a su vez una situación de tensión que le lleva a asaltar los poblados y castillos que se le opongan.
En medio de este conflicto se encuentra Skalice, una pequeña villa donde reside nuestro protagonista, Henry, hijo de un famoso herrero con un pasado lleno de secretos. Al ser sus padres asesinados ante sus ojos, Henry debe superar la perdida y comenzar un viaje en busca de venganza y madurar a base de experiencias.
El argumento es muy bueno, está cargado de detalles históricos y es perfectamente narrado, haciendo que queramos seguir avanzando para saber más. Pero lo que más nos ha gustado es que, a pesar de no poder crear un personaje a nuestro gusto, la actitud de Henry y la opinión que tengan sobre él cambiarán según nuestras decisiones y habilidades. Además, sus textos nos llegan en completo castellano para no perdernos ningún detalle.
Kingdom Come Deliverance es un RPG de mundo abierto que se desarrolla en la era medieval, con muchas conversaciones y acciones que definirán a vuestro personaje y un sistema de combate complejo y profundo. Es un juego que apuesta por el realismo, haciendo que Henry tenga que empezar prácticamente desde cero y haya que cuidarlo, ya sea comiendo, durmiendo o curando sus heridas entre otros muchos aspectos.
En primer lugar queremos hablar de su complejo sistema social, con un mundo que reacciona de manera muy realista a nuestras decisiones y forjan la personalidad de Henry. Es una delicia ver, por ejemplo, que si cometemos un crimen no tardan en avisar a las autoridades, tomar represalias e incluso cambiar su comportamiento hacia nosotros en un futuro, afectando directamente a nuestra economía. En las conversaciones tenemos varias opciones disponibles, siendo generalmente presionar al contrario, mentir o adularle para logran nuestro objetivo, indicándose después si hemos acertado con nuestra decisión.
Nos ha encantado la gran variedad de opciones que ofrece el juego para afrontar una misma misión, lo que hace que la experiencia sea prácticamente única cada vez que jugamos. Todo lo que ocurre está perfectamente integrado y se siente natural, reaccionando los personajes a cualquiera de nuestras acciones a pesar de tener sus propias rutinas diarias. Aquí influye incluso nuestra forma de vestir, tratándonos de manera diferente por los ropajes, el olor del personaje o los atributos que vamos aprendiendo, cada uno con sus ventajas e inconvenientes.
El sistema de combate es muy exigente y os llevará bastante tiempo entenderlo y dominarlo, encontrando además diferentes armas que cuentan con su propio estilo de manejo. Aquí tenemos cinco direcciones en las que podemos atacar, defendernos, esquivar o lanzar contraataques mientras nos movemos constantemente, entre otros muchos detalles. Es bastante complejo y requiere mucha atención y reflejos, pero la satisfacción que logramos tras ganar un combate pocos juegos consiguen transmitirla. Eso sí, en los primeros compases puede ser algo frustrante y si los rivales están bien equipados nos toca pensar detenidamente si nos conviene entrar en la disputa. Al combatir obtenemos recompensas interesantes, como mejorar nuestra habilidad con el arma cuanto más la usamos o, si acabamos con un rival, quedarnos con todo su equipamiento. Esto hace que podamos especializarnos en diferentes estilos de lucha, haciendo que la experiencia sea muy personalizada y divertida.
Junto a todo ello tenemos arcos que nos permiten atacar a distancia, aunque su manejo es un tanto complicado y si fallamos el disparo puede dejarnos al descubierto ante el ataque del rival, así que hay que saber usarlo en el momento preciso.
El equipamiento es esencial para nuestro viaje, por lo que gestionarlo bien es fundamental para progresar. Aquí podemos llevar accesorios de cada parte del cuerpo, útiles para alimentarnos y curarnos, y mapas u objetos que nos permiten interactuar con puertas o tesoros entre muchos otros. Esto no solo afecta a las estadísticas de nuestro personaje, sino también a su peso y agilidad, ya que si llevamos más elementos de la cuenta no podemos correr o saltar, algo esencial en determinadas situaciones. Además el dinero escasea mucho en el juego, así que estaréis constantemente regateando el precio al que queréis comprar o vender productos.
Las misiones son muy numerosas, variadas y existen muchas posibilidades a la hora de afrontarlas. Como siempre, tenemos las principales y junto a ellas otras secundarias que, en su mayoría, nos conviene realizar para ir mejorando las habilidades de nuestro personaje y su equipamiento, a la vez que nos vamos haciendo a los controles. Nos ha gustado que, según las deciones que tomamos, podemos tener acceso a unas u otras, ya que algunos de los habitantes pueden morir por una mala elección nuestra. El objetivo no siempre aparece marcado en el mapa, haciendo que en más de una ocasión tengamos que explorar los escenarios.
En el apartado gráfico encontramos tanto cosas buenas como otras malas. Por un lado, tenemos una recreación de escenarios realmente buena y realista, mientras que los personajes no están nada mal modelados y animados. Por otro lado tenemos problemas de rendimiento (más notables en consolas), con caidas de fotogramas, popping pronunciado, carga tardía de texturas y bugs que pueden estropear la experiencia. En general nos ha gustado, gracias también a unos geniales efectos, pero son defectos que deberían corregirse, más si tenemos en cuenta el gran parche de lanzamiento.
La banda sonora orquestada acompaña genialmente nuestras aventuras por el mundo, con melodías variadas del estilo de la época y de gran calidad. Los efectos también están muy cuidados, acompañados siempre de un trabajo bastante bueno de doblaje en inglés. Como hemos comentado, incluye textos en castellano para no perdernos ningún detalle sobre su estupenda historia o las mecánicas jugables.
Kingdom Come Deliverance nos ha sorprendido muy gratamente, con una ambientación que agrada a primera vista, mecánicas profundas y exigentes, una duración muy extensa y una gran rejugabilidad por la cantidad de maneras de afrontar una misma misión y sus resultados. Es cierto que existen muchos fallos gráficos y bugs que pueden molestar, pero es algo que puede corregirse en un futuo mediante actualizaciones.
Los que busquen un juego de rol profundo, realista y desafiante lo encontrarán en Kingdom Come Deliverance, siendo un título brillante que podría serlo aún más si se refinaran ciertas mecánicas, la interfaz y sobre todo los detalles técnicos.