PC
Xbox One
PS4

Vídeo análisis de Lost Sea, un colorido titulo de Eastasiasoft

Explora el interior del Triángulo de las Bermudas con Lost Sea, el nuevo juego de acción y aventuras de Eastasiasoft. En nuestro análisis os avanzamos todos los detalles y características de este título.

Lost Sea Análisis
Play

Su historia nos pone en la piel de un héroe que elegimos nada más comenzar, teniendo éste un accidente por culpa de una misteriosa tormenta mientras viajaba por el Atlántico. Cuando despierta se encuentra varado en la orilla de una cadena de islas que resulta ser el Triángulo de las Bermudas. Reclutando a un variopinto grupo de supervivientes nos toca navegar por estas peligrosas islas en busca de unas tablas que nos ayudarán a viajar por las aguas del Lost Sea y aventurarnos hasta el misterioso portal, nuestra única esperanza de volver a casa.

Estamos ante un título de acción y aventuras en el que exploramos un archipiélago generado proceduralmente, con millones de combinaciones únicas de islas que hacen que cada partida sea diferente a la anterior. Esto es un arma de doble filo, ya que mientras estamos en una misma cadena de islas genera la sensación de de haber vivido algo muy parecido una y otra vez.

Con el fin de avanzar nos toca conseguir unas tablillas que tenemos que llevar hasta la mesa de mapas, lo que da el acceso a nuevas islas. Estas tablas determinan el número de islas que podemos avanzar, encontrando en algunos lugares varias de ellas. Al no poder atacar mientras las transportamos, aconsejamos utilizar a algún ayudante para que las lleve.

Cuando rescatamos a determinados personajes se nos permite reclutarlos como nuevos miembros de la tripulación, teniendo cada uno sus propias características y ocupando un hueco en un grupo de hasta cuatro que desbloqueamos poco a poco. Cuentan con habilidades únicas como abrir el acceso a nuevas zonas, combatir junto a nosotros o forzar cerraduras. Cuidarlos es casi tan importante como defender al protagonista, ya que si uno de ellos muere lo perderemos para siempre. Lo malo es que su inteligencia artificial es totalmente nula, siguiendo a nuestro personaje en todo momento muy pegados y teniendo que estar muy pendientes de él, ya que puede quedarse enganchado en cualquier esquina y no seguirnos o morir con facilidad.

Las islas, que se dividen en tres niveles de dificultad, están pobladas por una amplia gama de peligrosas criaturas que cuentan con sus propios ataques y patrones de comportamiento, cambiando éstas dependiendo del bioma. Al final de cada cadena de islas encontramos a los jefes,  empeñados en impedir que escapemos del lugar y siendo los enemigos más poderosos. Hay que tener mucho cuidado, ya que también hay trampas que pueden acabar con nosotros al instante. En total encontramos cinco zonas, desbloqueándose éstas una vez llegamos.

Estos lugares están cargados de tesoros con dinero que, al visitar la mesa de trabajo, nos permite mejorar nuestro barco para localizar más fácilmente las tablas y nuevos ayudantes entre otros extras. También podemos mejorar las habilidades del personaje con los puntos conseguidos al derrotar a los enemigos, siendo muy útiles para la aventura. Esta mesa además permite consultar los tesoros que hemos conseguido o abandonar la isla en la que estemos cuando hayamos conseguido tablillas.

Junto a las monedas y los puntos de habilidad encontramos ciertos útiles que se asignan a los botones direccionales y que son de un solo uso, ocupando cada uno un hueco. De vez en cuando incluso encontramos un árbol especial que permite recuperar algo de vitalidad tanto para el protagonista como para su tripulación.

Lo peor de este juego es que al morir o abandonar una partida perdemos toda la experiencia y dinero que habíamos ganado, olvidando así las habilidades del personaje y las mejoras del barco que conseguimos con anterioridad, por lo que nos toca empezar desde cero. Cuando el personaje muere al menos nos dan algo de dinero y experiencia por las tablillas que tengamos. También se nos permite comenzar desde las zonas que hayamos desbloqueado.

En lo técnico es un título bastante flojo, con escenarios que, aunque resultan vistosos, suelen repetirse en exceso por generarse proceduralmente, reconociendo fácilmente donde aparecen ciertos enemigos por la forma familiar de algunas zonas. Los personajes y enemigos están bien modelados, pero sus animaciones son mejorables. Utiliza un estilo de dibujo animado que lo hace más llamativo, además de funcionar de manera muy fluida y tener efectos cuidados como la transición entre el día y la noche.

La banda sonora cumple sin más, acompañando bien la aventura. Los efectos están algo más trabajados y cuenta con textos completamente localizados al castellano para que comprendáis a la perfección su mecánica e historia.

Lost Sea es, como conclusión, una aventura en la que la exploración es el eje, encontrando de vez en cuando ciertos enemigos y trampas que complican nuestro avance. La historia resulta demasiado simple, con una dificultad que quizás no está demasiado bien ajustada y una tripulación que más que ayudar entorpece nuestro viaje, aunque son necesarios para realizar ciertas tareas. Pero lo que más molesta es tener que empezar prácticamente de cero cada vez que jugamos.

Su apartado gráfico, a pesar de ser llamativo en un primer vistazo, resulta demasiado simple y sus diseños muy repetitivos. El sonoro al menos cumple.

El hecho de que los escenarios se generen proceduralmente hace que sea tremendamente rejugable, pero esa misma característica consigue que canse pronto por la repetición de ciertas localizaciones y tareas.