Vídeo análisis de Nights of Azure

Su historia nos lleva hasta Ruswal, donde la batalla contra el demoniaco Nightlord  acabó con una victoria para la humanidad. En su derrota, el Nightlord derramó su sucia esencia, que echó raíces para formar un mal que persiste a día de hoy, la Sangre Azul. Lo que bañó esta sangre transformó los cuerpos y almas en demonios, y se convirtió en una plaga para la humanidad. A partir de entonces, aparecían en la noche para llevarse a la gente. Al hacerlo le robaron a la raza humana la propia noche. Acosados por las noches de insomnio causados por estos malvados demonios, la ciudad llego a ser conocida como “La Tierra Sin Noche”, un lugar que no existe en ningún mapa.

Una joven que fue rociada con la Sangre Azul, Arnice, fue maldita con habilidades de los bebedores de sangre. Vivió por aquellos que moraban en La Tierra Sin Noche y luchó por una mujer que estaba destinada a ser sacrificada por la Noche, Lilysse. Esta es la trágica historia de dos amigas que se enfrentan a decisiones imposibles que pondrán a prueba tanto su lealtad a la misión como a ellas mismas.

En esta ocasión estamos ante un RPG de acción que se divide en capítulos, desplazándonos hasta los distintos lugares a través de un mapa. Nos hubiera gustado que hubiera más continuidad entre zonas, pero los escenarios son bastante amplios y tenemos que explorarlos a fondo para encontrar diversos tesoros. Cada misión tiene un tiempo límite para ser completada, no siendo así con los poderosos jefes que encontramos a lo largo de la aventura.

Los comandos son muy sencillos, contando con un ataque fuerte y otro débil que combinados dan lugar a montones de ataques diferentes, un botón de defensa, un desplazamiento rápido para evitar golpes y un ataque especial que consume puntos SP, así como la posibilidad fijar enemigos y girar la cámara con libertad con el stick analógico.

Nuestra protagonista cuenta con una gran variedad de armas, tanto de corto como de largo alcance, y puede desplazarse libremente por los escenarios durante los combates. Gracias a la sangre azul Arnice cuenta con el poder de invocar demonios como aliados, llamados Servans, que luchan a su lado cuando se adentra en el campo de batalla. Para invocarlos necesitamos gastar puntos SP, pudiendo llevar hasta cuatro diferentes que asignamos a cada uno de los botones. Éstos tienen diferentes funciones dependiendo de su tipo, encontrando curanderos, atacantes, defensores, estafadores, seguidores o magos. Una vez invocados podemos utilizar los Servant Burst, habilidades especiales de cada criatura, a cambio de porciones de su poder.

Los escenarios son amplios y esconden secretos, teniendo trampas ocultas que pueden quitarnos vitalidad e interruptores para abrir nuevas rutas. Ciertas barreras sólo pueden ser destruidas por los Servans, teniendo que invocarlos para que nos echen una mano. También podemos darles determinadas órdenes como desbocarse, trabajar en equipo, beber sangre o seguirnos.

Arnice puede adquirir las formas de cinco demonios diferentes, cada una con sus propias habilidades y características. Para poder hacerlo tenemos que rellenar el medidor de transformación golpeando a los enemigos, gastándose poco a poco al activarlo y aumentando el poder de nuestros Servans. Cada Servan en nuestro mazo tiene su factor único de transformación, determinando estos factores la forma que asumimos. La Forma del Demonio permite manipular el fuego, la Forma del Conejo proporciona una velocidad sobrenatural, la Forma Fantasma la transforma en una francotiradora para atacar desde gran distancia, la Forma Armadura incrementa los atributos defensivos y ofensivos y, por último, la Forma Pesadilla, con la que se transforma en una abrumadora criatura demoníaca. Para desbloquear estas formas tenemos que alcanzar el nivel 10 o más de los factores.

Al igual que Arnice, los Servans ganan experiencia durante los combates, recibiéndola toda y aumentando su nivel al volver al hotel. Aquí también podemos transformar determinados objetos en Servans, equiparles reliquias o mejorar sus carácterísticas a cambio de utensilios. Cada Servan tiene su propia personalidad, reaccionando cuando forman equipos unos con otros. Como curiosidad, para aumentar el nivel de Arnice tenemos que acceder a un altar y entregar sangre azul a Jorth, desbloqueando además esta sangre nuevas habilidades o más Servans a través de los objetos obtenidos.

En el Hotel, que nos sirve como base, podemos comprar y vender armas junto con una gran variedad de equipamiento que nos ayuda en batalla. También podemos consultar el objetivo de las misiones o guardar nuestro progreso. Tras completar un determinado número de misiones, podemos negociar con Lloyd, el comerciante, para encargar raros y poderosos objetos. Desde aquí también podemos aceptar misiones secundarias que Simon, el propietario del hotel, nos ofrece para ganar dinero o diversos objetos. Estas misiones permiten además profundizar en interesantes aspectos de la historia principal. Como suele ser habitual en los títulos de Gust, otra serie de eventos aparecerán por los escenarios, descubriendo más datos sobre su argumento al conversar con los diferentes personajes.

Cuando avanzamos un poco en la historia se desbloquea la Arena, a la cual se accede desde el propio hotel. Este lugar cuenta con sus propias misiones, que nos ayudan a perfeccionar nuestras habilidades y conseguir recompensas especiales. Las misiones de este lugar tienen diferentes objetivos para conseguir la victoria y un ranking dividido en estrellas, desbloqueando un premio por cada una que obtenemos según nuestra puntuación.

Su apartado gráfico no está nada mal, con personajes bien animados y modelados, escenarios amplios a recorrer, mucha variedad de localizaciones y efectos llamativos. Es cierto que los escenarios están algo vacios y que las expresiones de los protagonistas en las escenas son bastante robóticas, pero lo compensan con un genial diseño artístico. Todo funciona con mucha fluidez, no encontrando caídas por muchos personajes que se muestren en pantalla.

Pero donde de verdad destaca el juego es en el sonoro, con unas melodías muy buenas en las que sobresalen las vocales, siendo éstas realmente espectaculares, y un doblaje en japonés muy bueno. Los efectos tampoco están nada mal. Por desgracia, y como suele ser habitual, nos llega completamente subtítulado en inglés, aunque no requiere un nivel muy avanzado del idioma para progresar en la historia.

Nights of Azure se presenta así como una nueva IP de bastante calidad, conservando el estilo visto en los títulos de Gust pero añadiendo un estilo de combate más centrado en la acción. Su argumento es bastante interesante, cuenta con una gran duración y los diferentes extras aseguran montones de horas de diversión por su rejugabilidad. Quizás peque de ser algo simple en sus misiones principales, aunque lo compensa con mucha variedad en la arena.

En lo técnico seguimos encontrando mucho margen de mejora, pero sus geniales diseños hacen que le restemos importancia. Su banda sonora es muy buena y cuenta con un gran doblaje en japonés y efectos cuidados.

Si os gustan los títulos de Gust, Nights of Azure no os decepcionará, destacando sobre todo el dinamismo de sus combates y su duración.