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Vídeo análisis de Shovel Knight

Llega a España en formato físico distribuido por BadLand Games el afamado juego de plataformas, acción y aventuras de Yatch Club Games, Shovel Knight.

Shovel Knight
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Su historia nos lleva hasta una tierra indómita por la que vagaban aventureros de leyenda. De entre todos, nadie como Shovel Knight y Shield Knight. Pero sus andanzas acabaron en la Torre del Hado, cuando un amuleto maldito desató una temible magia. Cuando Shovel Knight despertó, la Torre estaba sellada y Shield Knight había desaparecido.

Con el alma hecho jirones, Shovel Knight se retiró a una vida de soledad. Pero, sin campeones, un vil poder se adueñó de la tierra: ¡la Hechicera y su Orden Sin Cuartel! Ahora, el sello de la Torre ha caído y la destrucción se avecina. Una nueva aventura está a punto de empezar.

Esta historia es bastante entretenida y, a pesar de su simpleza, está muy bien llevada gracias a su gran sentido del humor y a su ligereza. Las versiones de las nuevas consolas además añaden tributos a algunos de sus juegos más emblemáticos, tales como God of War o Battletoads.

Jugablemente estamos ante un plataformas cargado de acción de estilo retro, con un manejo y otras opciones más actuales. Cavando, corriendo, saltando, luchando y explorando nos toca superar varias zonas temáticas con el fin de alcanzar nuestro objetivo y descubrir todos sus secretos.

Aquí podemos atacar a nuestros enemigos con la pala, ya sea horizontal o verticalmente con la caída de pala, además de cavar para conseguir dinero o desbloquear nuevas rutas ocultas. Contamos con dos medidores, uno de vitalidad y otro de magia, que se pueden mejorar al visitar a la maga o al gastrónomo en el pueblo. Hay diversas reliquias que conseguiremos a lo largo de la aventura, gastando éstas cierta cantidad de magia y teniendo que cambiar entre ellas desde el inventario. Para usar la reliquia tenemos que pulsar arriba y el botón de ataque. El oro que conseguimos nos sirve para comprar todo tipo de objetos, siendo muy necesario en la aventura. También podemos subir a un área por encima de Shovel Knight enganchándonos a la plataforma mientras saltamos.

Hay puntos de control que nos permiten continuar desde ellos si los hemos activado con anterioridad. Si los rompemos conseguimos su tesoro, aunque no los podremos volver a utilizar. Un detalle a tener en cuenta es que si Shovel Knight es derrotado continuará desde el último punto de control activado, perdiendo una cuarta parte del oro conseguido en bolsas voladoras. Este oro puede ser recuperado si actuamos con rapidez.

Poco a poco podemos mejorar a nuestro protagonista, ya sea con más vitalidad, magia, reliquias mágicas, nuevas armaduras imbuidas de poderes y habilidades, o palas forjadas que le añaden nuevas y fantásticas propiedades.

Los enemigos son variados y tienen patrones de movimientos muy diferentes entre sí. También los hay de tamaños muy dispares, siendo algunos de ellos descomunales para tratarse de enemigos corrientes. No podían faltar los poderosos jefes finales, con ataques más complejos y movimientos menos predecibles, siendo más complicados a medida que avanzamos en el juego.

Al salir al mapeado podemos desplazar al personaje libremente por sus caminos, encontrando la Villa para conseguir equipamiento, mejoras y hablar con todos sus habitantes, la Guarida de la Orden Sin Cuartel, donde combatir a uno de los siervos de la Hechicera, Áreas de Bonificación para conseguir gemas, aunque en ocasiones necesitemos un objeto especial para acceder, Puertas Cerradas en las que necesitaremos una llave para avanzar y otras muchas zonas secretas. Mientras paseamos por el mapa podemos encontrarnos con Enemigos Errantes, entrando en combate si nos cruzamos con ellos y obteniendo jugosas recompensas si conseguimos la victoria.

Su duración es bastante extensa gracias a la multitud de secretos que esconden sus niveles y a la nueva partida plus. Pero si todo esto os parece poco, con la actualización Shovel Knight: Plague of Shadows todo se amplía, incluyendo una historia propia, nuevos movimientos, jefes, reliquias y niveles modificados, estando protagonizado por  Plague Knight. También se añaden dos campañas protagonizadas por King Knight y Specter Knight, el Modo Desafío, donde superar una serie de retos, el Modo Body Swap, que cambia el sexo de todos los personajes del jeugo, y el Modo Batalle, combatiendo cuatro jugadores de manera local. Todos estos contenidos, tanto los que ya están disponibles como los que saldrán en un futuro, son totalmente gratuitos.

Las versiones de las consolas PlayStation además son compatibles con la función Cross-play, pudiendo jugar al juego en cualquiera de sus tres plataformas comprando un solo juego (sólo con la versión digital), y Cross-save, que permite continuar el progreso del juego en otras plataformas.

Gráficamente nos encontramos con una estética retro de 8 bits en la que han cuidado todos sus detalles, con diseños de escenarios y personajes muy variados y trabajados, añadiendo elementos actuales que hacen que tenga un encanto muy personal. Un estilo que agradará a los amantes de los juegos clásicos.

Su banda sonora, como no podía ser menos, tiene ese toque retro que gusta tanto a los nostálgicos, con montones de melodías simpáticas y pegadizas. A lo largo del juego encontramos diversas partituras ocultas que debemos entregar al bardo, siendo éstas uno de los coleccionables del juego, permitiéndonos escuchar las canciones si acudimos a él. Los efectos de sonido también son muy buenos.

Como conclusión podemos decir que Shovel Knight es un gran homenaje a los juegos clásicos de acción y plataformas, conservando el gran control del que hacían gala y añadiendo elementos propios y actuales que lo hacen muy apetecible. La duración del juego es muy extensa, más si tenemos en cuenta la gran cantidad de contenidos que se añaden gratuitamente.

Tanto su apartado gráfico como el sonoro son muy buenos, respetando el estilo clásico de 8-bits y con muchos añadidos actuales.

Un título que agradará a los amantes de los juegos de plataformas clásicos, con una fórmula que encaja a la perfección y una dificultad muy bien ajustada.