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Vídeo análisis de Yakuza 6 The Song of Life

El largo viaje del Dragón de Dojima llega a su fin con Yakuza 6: The Song of Life, la nueva entrega de la famosa franquicia de acción y aventuras de Sega. Descubre más sobre este épico juego con nuestro análisis.

Cartel Yakuza 6 - The Song of Life
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Su historia se centra de nuevo en Kazuma Kiryu, que vuelve al Orfanato Mañana de Gloria para vivir con Haruka y los otros niños tras confesar ésta que Kiryu era su familia y abandonar su carrera de idol, aunque en ese momento Kyriu regresa a prisión para cumplir una condena de tresaños por participar en el conflicto. A pesar de que esto no tiene un gran peso para el protagonista, ya que busca redimir sus pecados del pasado, fuera de la prisión Haruka sufre las consecuencias de su declaración, siendo rápidamente relacionada con los yakuza por los medios.

Han pasado cuatro años y Kiryu sale de la cárcel, todo para descubrir que Haruka se había desvanecido en la noche, sin mediar palabra. Kiryu, con el sentimiento de culpabilidad por no haber estado a su lado, viaja hasta Kamurocho en busca de Haruka. Cuando ya todo parecía perdido,  recibe una llamada del detective Makoto Date, quien le confiesa que Haruka ha sido víctima de un atropello y se encuentra inconsciente y en estado crítico. Al enterarse en el hospital del estado de Haruka queda devastado, sobre todo al descubrir que el sospechoso anda fugado y que Haruka sólo intentaba proteger a un bebé que resulta ser su hijo.

A partir de aquí y siguiendo una pequeña pista, Kiryu viaja hasta Onomichi Jingaicho, una antigua ciudad portuaria dominada por el tercer sindicato yakuza más grande de Japón, la Alianza Yomei, que nunca fueron aliados de su grupo. Nuestro objetivo es buscar respuestas, todo mientras nos enfrentamos a una gran amenaza.

Este argumento, como viene siendo habitual, es muy interesante y está lleno de giros inesperados que atraen nuestro interés, con personajes muy carismáticos y montones de secretos a descubrir. Es cierto que el comienzo puede hacerse algo pesado por los continuos diálogos y la nula interactividad, pero está bien para ponernos en situación de todo lo ocurrido. Además, no es necesario haber jugado a pasadas entregas de la franquicia, ya que mediante flashbacks nos van poniendo en situación, habiendo incluso habilitado una web para presentarnos la trama y sus personajes. Eso sí, siempre es recomendable jugar al resto de juegos, ya que se profundiza aún más, sobre todo al empezar donde lo dejó la quinta parte.

Yakuza 6: The Song of Life es un juego de accion y aventuras con tintes de rol que se desarrolla desde una perspectiva en tercera persona, con montones de tareas a realizar y dos ciudades principales en donde recae casi toda la trama, siendo amplias y con bastante libertad para recorrerlas. Como curiosidad, tenemos una cámara en primera persona para nuestros paseos por la ciudad, lo que os permitirá incluso sacar instantaneas de gran belleza.

En esta ocasión, y para adaptarse a los tiempos que corren, contamos con un móvil que nos sirve como menú y cobra un gran protagonismo, desde el cual podemos conversar con otros personajes, aceptar misiones secundarias, consultar el mapa o gestionar el equipamiento de Kiryu y sus capacidades entre otras muchas tareas. Es muy habitual ir paseando tranquilamente y recibir notificaciones en el móvil constantemente.

El sistema de combate sigue conservando toda su esencia, con mezclas de patadas y puños de diferentes intensidades para realizar combos, los agarres, el bloqueo y la posiblidad de utilizar el entorno a nuestro favor. Todas estas capacidades se ven aumentadas al ir avanzando en el juego, aprendiendo nuevos movimientos y mejorando las estadísticas generales del personaje.

Las Acciones Heat siguen estando presentes para acabar con los enemigos de montones de formas diferentes según el objeto equipado, pero ahora se ven incluso más espectaculares gracias a un sistema de físicas que hacen que el cuerpo de los rivales reaccione según la zona que golpeemos, con pequeños quick time events muy bien implementados. Por otro lado tenemos el Modo Extreme Heat, que hace que Kiryu potencie su poder, defensa y habilidades, volviéndose muy resistente y ganando la capacidad de utilizar objetos enormes que de otra forma no podría coger. Las Acciones Special Heat sólo pueden utilizarse en este modo para realizar los movimientos más poderosos y espectaculares del juego. Junto a nosotros de vez en cuando luchan amigos, pudiendo incluso realizar acciones conjuntas muy potentes.

Al acabar con enemigos o realizar taras secundarias de todo tipo, conseguimos experiencia que se divide en cinco ramas diferentes. Ésta se puede invertir en mejorar sus estadísticas generales, aprender habilidades de batalla y potenciarlas, acciones Heat u otro tipo de habilidades, como una mayor tolerancia al alcohol, entre muchas otras. Así han conseguido un gran nivel de personalización, teniendo que realizar diversas actividades para ir consiguiendo puntos de cada rama.

Una de las novedades más interesantes es la batalla de clanes. Aquí tenemos que gestionar a nuestros personajes con el fin de acabar con todos los rivales y su jefe. Para ello hay una barra que se rellena poco a poco y nos permite ir reclutando a gente para la batalla, teniendo cada uno un estilo de combate que es ventajoso sobre otro. No es muy complejo pero, como pasa con los minijuegos, ayuda a romper con la monotonía de las batallas.

Las dos localizaciones que visitamos principalmente no son excesivamente grandes, pero como siempre están llenas de tareas a realizar. Entrenar en un gimnasio y seguir una dieta para mejorar nuestras capacidades, ayudar con incidencias que llegan a través de la aplicación Troublr, un café para el que tenemos que encontrar gatos y cuidarlos o participar en los clásicos juegos de bar son muchos de los que encontraréis a lo largo del juego. No podían faltar las recreativas de Sega, donde podréis jugar a Fantasy Zone, Outrun, Space Harrier, Super Hang-On o, como novedad, a Puyo Puyo y Virtua Fighter 5: Final Showdown. Hay también diálogos con chicas en clubs y una especie de chat en el que se simula una conversación con chicas reales, donde tenemos que ir pulsando una serie de botones para ir escribiendo frases que den lugar a diversas situaciones.

En cuanto a duración, la aventura principal puede completarse en unas 20 horas, tiempo al que hay que sumarle la gran cantidad de tareas secundarias, siendo estas muy variadas y divertidas de completar. Quizás no encontréis tanto contenido como en pasadas entregas, pero os aseguramos que no es algo de lo que debáis preocuparos.

Donde hemos encontrado varios cambios es en su apartado técnico, con personajes mejor modelados y animados, una ciudad muy detallada que ha eliminado ciertos tiempos de carga, una iluminación muy realista o unas físicas más cuidadas. En general nos ha gustado mucho, a pesar de encontrar pequeños detalles como una falta de antialiasing en los escenarios que afea el resultado o ciertos cortes en la versión normal de la consola.

En el sonoro encontramos melodías de todo tipo y gran calidad que concuerdan a la perfección con cada momento que vivimos en el juego. Pero donde de verdad destaca es en la genial ambientación de su mundo, que está cuidado hasta el más mínimo detalle. No hay que olvidarse del estupendo doblaje en japonés del juego, aunque por desgracia sus textos nos vuelven a llegar en inglés, no exigiendo un nivel demasiado alto para seguir el argumento.

Como conclusión, Yakuza 6: The Song of Life quizás no sea la entrega más destacada de la franquicia, pero sirve como gran final para el viaje de Kazuma Kiryu. La historia es muy buena, los combates ganan en diversión con los pequeños añadidos, la exploración de escenarios es más fluida y la gran cantidad de tareas secundarias aseguran muchas horas de juego. No hay que olvidarse de la posibilidad de jugar con un amigo a los minijuegos y ciertas recreativas.

Es un juego que nadie debería perderse, con un mundo que se siente vivo, único y en el que nosotros podemos influir. El final perfecto para Kiryu y los aficionados de la saga.