Vídeo análisis de Yonder The Cloud Catcher Chronicles

Su historia nos traslada hasta la enorme isla de Gemea, un exuberante lugar que cuenta con ocho ambientes distintos. Cada uno tiene su propia flora y fauna, junto con estaciones cambiantes y un ciclo de día-noche. Gemea, que una vez fue un paraíso, todavía mantiene su apariencia, pero un oscuro mal ha envuelto al lugar y a su gente en la desesperación. Nuestro protagonista, al que creamos nosotros nada más comenzar la aventura, tendrá que descubrir los misterios del lugar y localizar el origen de todos los males que asolan a la isla.

Como véis, el argumento no es uno de los aspectos más destacados del juego, sirviendo como mera excusa para empezar a explorar la isla, conocer a todos sus habitantes y empezar a cumplir misiones.

Yonder: The Cloud Catcher Chronicles es un juego centrado en la exploración, la recolección de recursos y la creación de otros para ayudar a los isleños con sus necesidades, todo ello mientras intentamos avanzar en la trama localizando a los duendes ocultos por su mundo que nos ayudarán a disipar la oscuridad que lo asola.

Nuestra primera tarea es la de crear a nuestro personaje eligiendo su sexo, tonalidad de cara, de pelo, la forma del cuerpo, su tamaño y el color de los ojos. No os preocupéis demasiado por su apariencia inicial, ya que a lo largo del juego podemos modificarla con diversos objetos de equipamiento, como ropa, pelucas o incluso tintes de pelo.

Las mecánicas utilizadas son muy sencillas, por lo que cualquier tipo de jugador se adaptará rápidamente a ellas. Tenemos la posibilidad de desplazarnos libremente por su mundo, saltar o incluso interactuar con ciertos elementos del entorno, aunque para ello en ocasiones tenemos que utilizar las herramientas que conseguimos al realizar misiones o hacer intercambios en los puntos dedicados a ello. No esperéis nada de acción o utilizar las herramientas en cualquier parte del mundo, ya que sólo podréis manejarlos en los espacios que sean necesarias. Además contamos con un mapa para que localizar objetivos resulte una tarea bastante más sencilla, dibujándose éste a medida que lo recorremos.

Una de las curiosidades es que nuestro personaje no encontrará ninguna amenaza en la isla que pueda acabar con su vida. Esto sólo puede ocurrir si caemos en aguas bastante profundas, apareciendo entonces el personaje poco antes de realizar ese movimiento. Gracias a ello se consigue que sea un juego muy simpático y apto para todo tipo de públicos, con diseños coloridos que agradan a la vista desde un primer momento.

Tan pronto empecéis a cumplir misiones, encontraréis a personajes que os ofrecerán sus conocimientos, lo que os permitirá aprender todo tipo de oficios que ampliarán el rango de objetos que podéis crear. Una vez dominados, podréis subirlos de nivel según fabriquéis objetos de su apartado, lo que desbloqueará a su vez otros nuevos útiles. No todos los objetos que necesitáis para crear están disponibles desde el principio, por lo que os tocará cambiar objetos de cierto valor para igualar el precio del que queremos en los puntos de intercambio. También hay otros que se venden por unas monedas que encontraréis a lo largo del juego.

Los escenarios son de un tamaño considerable y, aunque algunos lugares son fáciles de encontrar a simple vista, hay otros realmente bien ocultos a los que sólo podréis acceder tras algo de investigación. Para que desplazarnos entre los diferentes ecosistemas sea más sencillo, encontraréis unas cabezas de piedra que nos permitirán viajar rápidamente entre ellas, aunque antes os tocará cumplir la misión que se os proponga para activarlas.

En determinados lugares de la isla encontraréis zonas en las que podemos crear una granja, siendo ésta muy útil para obtener recursos. En ella podemos crear establos para animales o huertos para cosechar ciertas plantas, colocando todo de la forma que creamos más oportuna para facilitar el acceso. Hay muchas criaturas deambulando libremente por la isla. Si les ofrecemos un alimento que les atraiga, podemos llevarlas hasta nuestra granja para que viva allí y podamos conseguir ciertos útiles a cambio de alimento y cuidados. Con el fin de que esta tarea resulte más sencilla, contratar empleados se vuelve esencial durante nuestros recorridos por el mundo, siempre y cuando les hayamos hecho algún tipo de favor.

La duración de la historia principal no es demasiado extensa, pero se amplía considerablemente si queremos realizar todas las tareas disponibles, descubrir los secretos que oculta la isla y participamos en pequeños minijuegos como la pesca.

El apartado gráfico es quizás uno de los elementos más destacados del juego, ya que entra rápidamente por los ojos. Cuenta con unos diseños simples pero muy coloridos, detalles por todas partes, climatología, ciclo día-noche y efectos como la iluminación muy conseguidos. Cada bioma hará que os entren más ganas de seguir explorando aunque sólo sea por contemplar sus preciosos paisajes. La cámara, a pesar de tener algunos defectos, funciona bastante bien y casi siempre ofrece una buena perspectiva de los escenarios. Todo ello además con un framerate muy suave.

En el sonoro encontraréis melodías simpáticas y buenos efectos que ambientan perfectamente las diferentes situaciones que se nos presentan, con ausencia de voces para los personajes pero teniendo pequeños ruiditos en su lugar. Lo mejor es que sus textos nos llegan en completo castellano, así como en otros idiomas, y, aunque no es el mejor trabajo que hayamos visto, cumplen su cometido correctamente.

Yonder: The Cloud Catcher Chronicles es una aventura que debido a la repetición de tareas a la larga puede hacerse pesado, pero que nos invita a seguir jugando por descubrir todos sus secretos y ver sus bellos parajes. Es un juego apto para toda la familia, con ayudas para facilitar la tarea a los más jóvenes de la casa. Además, hay que tener en cuenta que se lanza a precio reducido y su duración es bastante extensa.

Si no echáis en falta la acción y os gusta recolectar y crear recursos, Yonder: The Cloud Catcher Chronicles es una buena opción de compra.