Ficción para buscar la realidad

El siglo XXI, en términos de ocio, es el del desarrollo de los videojuegos, las consolas y, en definitiva, el entretenimiento.

Si bien en los años 90 ya era habitual que uno de los regalos más populares fuesen la Nintendo 64 o la Playstation, con el paso del tiempo y la potenciación de recursos todo ha crecido exponencialmente. Esos niños han crecido y ello ha hecho que la edad media de personas que disfrutan de este pasatiempo sea mucho mayor. Los niños del pasado son los adultos del presente. Evadirse de la realidad a través de una ficción... cada vez más real.

Mucho ha llovido desde que las célebres ediciones de FIFA o Pro Evolution Soccer competían por el trono del fútbol online. Pero no es el mundo de los deportes el que más potencia el hiperrealismo. Las aventuras en las que podemos manejar a un personaje en un mundo real, donde realizar acciones cotidianas, con el universo 'Grand Theft Auto' como leitmotiv, son el ejemplo supremo de evolución. A finales de los 90 nació la famosa saga y en la última edición, GTA V o sus versiones online, las posibilidades son aún más eternas que las anteriores. Conducir todo tipo de vehículos, cambiar la apariencia del personaje, hacer paracaidismo, interactuar con otros usuarios e incluso apostar en casinos de manera virtual.

Este tipo de juegos, donde la adrenalina toma protagonismo a través de blackjack, póker, bacarat o tragaperras online, también tienen cabida con juegos de casino propios de consolas, más allá de aparecer de soslayo en el GTA. Aunque la evolución tecnológica no ha dejado de lado el mundo de los juegos de azar como tal. En casas de apuestas, para todos aquellos que busquen poner en juego dinero real. Las diferentes plataformas de apuestas virtuales no solamente cuentan con la posibilidad de apostar al campeón de la próxima Champions League o el venidero anillo de la NBA, brindan la ocasión de 'sentarse' enfrente de una ruleta o de máquinas tragamonedas en su casino en línea. Temáticas variadas y versiones diversas de las que se pueden encontrar en cafeterías o salones de juego. El realismo llevado al mundo del azar para aquellos que prefieran la comodidad del hogar.

La evolución

Las portadas que copaban Zidane, Ronaldo, Raúl o Beckham ahora son de Messi, Mbappé o Cristiano Ronaldo. Por aquel entonces el simple hecho de manejar a nuestros ídolos era un logro. Ahora el logro es distinguir si el partido en el televisor es real o de la última edición del videojuego en cuestión. En los inicios del GTA, la cámara cenital obligaba a utilizar la imaginación para tener una experiencia de juego completa. Ahora es difícil imaginar algo que no pueda llevarse a cabo con el personaje.

Si alguien pretendía jugar una partida de póker o de blackjack, la única opción era visitar un casino. Ahora el casino está a unos clics de distancia. El límite de la evolución de la tecnología es imposible de vaticinar, sea cual sea el ámbito, pero la realidad virtual es cada vez menos virtual y más real. El siguiente paso ya está aquí, pues hay ciudades digitales en el metaverso que ya permiten incluso comprar terrenos para 'edificar'. Ahora resulta complicado pensar que todos tendremos allí un hogar, pero no hace tanto también lo era tratar de manejar personajes que pudieran ir a peluquerías o robar bancos, o personarse en un casino desde el sofá de casa...