Análisis de los auriculares Turtle Beach Elite 800X

Los auriculares Turtle Beach Elite 800X son 100% inalámbricos, para escuchar el juego y hablar en los chats, por lo que no hacen falta cables hacia el mando o Xbox One. Gracias a la última tecnología inalámbrica se consigue un sonido cristalino y se incluyen características avanzadas para crear la experiencia de juego más cómoda e inmersiva posible, con un sistema inteligente de selección de canal que ofrece una experiencia libre de interferencias. Cuentan con altavoces de 50mm que suenan de forma asombrosa, además de ser extremadamente cómodos gracias a las esponjillas viscoelásticas forradas de piel para los oídos, aunque en lugares acalorados pueden causar algo de sudor.

Entre sus características encontramos un sonido envolvente DTS Headphone: X 7.1, que ofrece una fidelidad y un sonido espacial increíble. Es muy configurable, ofreciendo modos de audio envolvente DTS a medida, otros combinados y configuraciones específicas de serie para cada género. En total encontramos 18 ajustes preestablecidos divididos en 4 modos, ajustándose a todo tipo de servicios.

El Superhuman Hearing, un procesamiento de sonido exclusivo de Turtle Beach, permite escuchar hasta los sonidos más ligeros, lo que ayuda a obtener cierta ventaja en los shooters al reconocer las pisadas de los enemigos antes de verlos. Además, gracias a la cancelación de ruido eliminamos las distracciones no deseadas cuando los conectamos.

Los Elite 800X nos permiten seleccionar nuestra mezcla de niveles favorita entre juego y chat de voz. Podemos monitorizar el micro para poder oír nuestra propia voz a través de los cascos y evitar gritar. Cuentan con dos micrófonos ocultos de alta calidad con cancelación de ruido y distintas configuraciones, asegurando la mejor comunicación en cualquier ambiente. Todo esto unido al Dynamic Chat Boost, que ajusta automáticamente el nivel del chat durante los picos de sonido, hace que tanto nosotros como nuestros compañeros no nos perdamos nada.

Contamos con una base magnética que es muy cómoda de utilizar tanto de soporte como para la recarga de los auriculares. Tan sólo hay que colocarlos en la base cuando dejemos de utilizarlos para que se recarguen, proporcionando una autonomía de unas 10 horas si se carga al completo. Desde aquí podemos configurarlos de forma sencilla, haciendo a su vez de transmisor inalámbrico hacia el auricular.  Si lo preferimos podemos descargar la app Ear Force Audio Hub para cargar nuestras configuraciones sobre la marcha desde un PC, Mac o dispositivo Android. Para empezar a jugar tan solo hay que conectar la base de carga a Xbox One con los cables USB y óptico que vienen incluidos.

Con su Bluetooth podemos conectarnos inalámbricamente a dispositivos compatibles como tablets y móviles, ya sea para recibir llamadas mientras jugamos, oír notificaciones de texto o escuchar música. Esto permite utilizarlos a su vez como auriculares normales para estos dispositivos, obteniendo una calidad excelente de audio.

Además, para aquellos a los que les guste tener unos cascos personalizados, incluye carcasas de auricular intercambiables, encontrando montones de diseños en la web oficial de Turtle Beach.

Su diseño es muy elegante, con materiales de plástico y colores que recuerdan en todo momento que están dedicados a Xbox One. En el lateral de los cascos encontramos todos los botones, como cambiar el volumen, las configuraciones, mutar el micrófono o activar el Bluetooth.

En resumen, los Turtle Beach Elite 800X son casi sin ninguna duda los mejores auriculares inalámbricos del mercado para los usuarios de Xbox One, siendo igualmente validos para ser usados en Windows, Mac y otros dispositivos compatibles, si bien es en la consola de Microsoft donde nos ofrecen los mejores resultados, habiendo que comentar en este último sentido que hay también disponible desde hace unos meses una versión especifica de estos mismos auriculares destinados a PlayStation 4 y PlayStation 3.

Sin embargo a la hora de valorarlos en su justa medida hemos de tener en cuenta que al tratarse de un periférico de gama alta, su elevado precio de unos 300 euros puede suponer toda una barrera para muchos, estando orientados sobre todo a gamers profesionales o a quienes deseen disfrutar de la mejor calidad de audio por encima de cualquier otra consideración.