Wii U

Vídeo análisis de Kirby y el Pincel Arcoiris

El entrañable Kirby vuelve a Wii U con una nueva aventura donde todo está creado como si fuera de plastilina.

Kirby y el Pincel Arcoiris
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Su historia nos lleva hasta un día apacible como otro cualquiera en la siempre animada Dream Land. Kirby y sus amigos se dedican a lo suyo cuando, de repente, un bribón envuelto en misterio emerge de un portal para absorber todo el color que rezuma el hogar de Kirby.

 

Ahora Kirby debe emprender la tarea de devolver a Dream Land su belleza y resplandor anterior. Con la ayuda de un pincel mágico conocido como Eline, Kirby se adentra en el portal de un salto y se embarca en otra colorida aventura.

 

Su jugabilidad es muy parecida a lo visto en Kirby: el Pincel del Poder de Nintendo DS, teniendo que dibujar cuerdas arcoíris en la pantalla táctil del GamePad de Wii U para guiar a Kirby hasta su objetivo. Estas cuerdas nos permiten hacer anillos, sortear obstáculos, catapultar a Kirby o protegerlo ante un peligro inminente. Sólo podemos dibujar una cantidad de cuerda arcoíris a la vez, desapareciendo al cabo de un tiempo, y si nuestra barra de pintura se agota no podemos trazar de nuevo hasta que se recargue.

 

No todo es dibujar cuerdas, ya que Kirby cuenta con una serie de habilidades especiales que le ayudan a restaurar la esplendorosa imagen de Dream Land. Gracias a la Velocidad Anular podemos dibujar anillos que hacen que Kirby reciba un acelerón, mientras que con la Turbo Carga aplastamos enemigos y rompemos bloques tocando al protagonista. Si además obtenemos cien estrellas y mantenemos pulsado a Kirby podemos realizar el Turbo Estelar, con el que destruir bloques más duros, enemigos poderosos o conseguir un mayor impulso.

 

En ciertas ocasiones a Kirby le toca transformarse en una serie de vehículos para superar obstáculos, utilizando cuerda arcoíris de diversas formas según la transformación. A Kirby Cohete lo guiamos mediante la cuerda, atravesando todo lo que se encuentre en su camino y ganando impulso al atravesar los aros. Con Kirby Tanque avanzamos lentamente por el camino que le trazamos y dispara al lugar que le señalamos, pudiendo lanzar una gran ráfaga de cohetes al conseguir las cien monedas. Por último tenemos a Kirby Submarino, que surca las aguas dirigiéndose hasta el punto que tocamos, guiando sus misiles mediante las cuerdas arcoíris.

 

De vez en cuando encontramos repartidos por el modo principal pequeños desafíos en los que tenemos que conseguir el tesoro antes de que se agote el tiempo. Una vez desbloqueados podemos jugarlos tantas veces como queramos en Desafíos para tratar de alcanzar la mejor puntuación posible, encontrando un total de 48 y teniendo cada uno de ellos una duración de quince segundos.

 

Cada nivel cuenta con una  serie de cofres del tesoro ocultos por los escenarios, siendo el mayor reto del juego encontrarlos todos. Pueden estar en zonas en las que hay que activar ciertos objetos, al atravesar una zona incolora en la que no podemos crear nuestra cuerda o al recoger todas las piezas de un puzle entre muchas otras. Estos tesoros nos permiten conseguir diferentes extras, como figuras de plastilina de diversos personajes y objetos del juego, o música de anteriores entregas de la saga y del juego actual, encontrándolas todas en la sala de música. Al final de cada nivel también podemos conseguir páginas del diario secreto para conocer la historia y personajes más en profundidad.

 

Además existe el reto de conseguir la puntuación de oro  de cada nivel, intentando obtener el mayor número de estrellas posible.

 

No podían faltar los jefes, siendo desafiantes y muy llamativos de ver, aunque es una pena que sean bastante escasos y se repitan con el paso de las fases, aumentando un poco su dificultad en cada encuentro.

 

El juego incluye un modo multijugador hasta para cuatro jugadores, afrontando la aventura todos juntos cooperativamente. Sólo el jugador con el GamePad de Wii U maneja a Kirby dibujando cuerdas arcoíris, encarnando el resto de participantes a Waddle Dees en cualquier momento ya sea con el mando de Wii o el Pro de Wii U. Los Waddle Dees pueden recorrer cuerdas arcoíris, recoger objetos, atacar con sus lanzas y echarle una mano a Kirby, siendo los responsables de detener a las Tomanitas que intentan echarle el guante a Kirby y que sólo aparecen en esta modalidad.

 

Las figuras amiibo también tienen su función en este juego, desbloqueando un potenciador cada uno de los compatibles una vez al día y en un único nivel. Con el amiibo de Kirby podemos usar un Turbo Estelar en cualquier momento sin necesidad de reunir las cien estrellas de punto, Rey Dedede coloca una corona a Kirby y le proporciona seis barras de salud en lugar de las cuatro habituales, y Meta Knight le da a su famosa máscara para potenciar su turbo.

 

Gráficamente es muy llamativo, con diseños de plastilina coloridos y personajes muy bien animados, aunque una vez acostumbrados a él notamos que no se le saca todo el partido a este tipo de textura.

 

Su banda sonora sigue siendo tan buena como en el resto de entregas de la saga, con temas conocidos reinterpretados y otros completamente nuevos. Los efectos de sonido también están muy conseguidos.

 

En conclusión, Kirby y el Pincel Arcoiris es un plataformas cuya jugabilidad es muy entretenida, pero echamos en falta algo más de variedad en su desarrollo. Los tesoros y la gran cantidad de coleccionables a conseguir hacen que la aventura gane algo de dificultad y duración, siendo un titulo bastante sencillo. Destaca sobre todo su divertido multijugador cooperativo. La utilidad de las figuras amiibo en este juego nos parece prescindible.

 

El diseño de los personajes y los escenarios son muy buenos, aunque se echa en falta más variedad.  Las melodías, como siempre, gozan de una gran calidad al igual que sus efectos de sonido.

 

Kirby y el Pincel Arcoiris sorprende por sus logrados diseños, siendo un título muy divertido y entretenido pero mejorable en pequeños detalles.