Vídeo análisis de Lords of the Fallen
Distribuido por Bandai Namco nos llega Lords of the Fallen, el nuevo RPG de CI Games y Deck 13 para la nueva generación de consolas y PC.


Su historia nos pone en la piel de Harkyn, un hombre cuya conciencia carga con un extenso historial de maldades… Pero será precisamente ese pasado oscuro lo que lo convierte en la única persona que va a poder evitar que el mundo se sumerja en la oscuridad eterna. Un dios caído envía a un ejército demoníaco a la Tierra para que, bajo las órdenes de los poderosos “Lords of the Fallen” acabe con toda la humanidad.
Harkyn será el único que podrá hacerle frente. La historia de este épico mundo de fantasía nos presenta una rebelión contra una fuerza hostil inimaginable, así como la idea de que la esperanza siempre puede surgir del lugar menos esperado.
Hay tres clases entre las que elegir: Guerrero, con una gran defensa a costa de su agilidad y que va equipado con un escudo y una espada, Clérigo, el más equilibrado de todos gracias a su movilidad y defensa, y Rufián, que es muy ágil y utiliza dagas, cada uno con su propio árbol de habilidades personalizable. Aquí además elegimos entre uno de los tres tipos de magia disponibles: Altercado, con la que podemos abrumar a nuestros oponentes con fuerza bruta y poderosos hechizos, Decepción, que engaña a los enemigos y los hiere sin posibilidad de recuperación, y Alivio, con hechizos defensivos que nos curan y protegen. Esta elección es muy importante, ya que determina nuestro estilo de juego a lo largo de la aventura.
En total encontramos 11 tipos de armas, que lucen y se sienten totalmente diferentes. Estas armas y objetos pueden contar con diferentes propiedades mágicas que las hacen más poderosas.
Jugablemente contamos con un botón de ataque normal y otro poderoso, pudiendo utilizar nuestro escudo para bloquear golpes y lanzar nuestro contraataque, encadenando combos para causar un mayor daño. Si es demasiado fuerte como para ser bloqueado podemos esquivarlo rodando por el suelo. Pulsando el botón de objetos cambiamos entre los que tenemos equipados, usándose estos si lo dejamos apretado. También se nos ofrece la oportunidad de cambiar nuestro estilo de lucha, equipando el arma a dos manos para un estilo ofensivo o con escudo y arma para un mayor equilibrio, además de utilizar diferente equipamiento, como el guantelete, que obtenemos a lo largo de la aventura.
Hay tres barras que representan nuestra vitalidad, magia y resistencia, siendo ésta última esencial en la aventura ya que es la que nos permite atacar, defendernos, esquivar o correr, por lo que hay que estar siempre pendientes de ella.
Contamos con Fragmentos de Guardado que nos sirven como punto de control desde donde continuar la aventura si nuestro personaje muere. Aquí podemos almacenar toda la experiencia obtenida para canjearla por mejoras de hechizos o atributos. Hay que tener en cuenta que cuanta más llevamos con nosotros mejor recompensa sueltan nuestros rivales, pero existe la posibilidad de perderla en cualquier momento. Además podemos recuperar toda nuestra vitalidad y conseguir un par de pociones que nos vienen muy bien ya que son bastante escasas.
Si caemos en batalla, nuestro fantasma se levanta del cadáver, quedando temporalmente atrapados entre nuestro mundo y el más allá. Si conseguimos reunirnos con nuestro fantasma podemos recuperar la experiencia perdida, aunque se desvanecerá si morimos de nuevo. También podemos optar por quedarnos cerca y recuperar poco a poco vitalidad que nos ayudará en el combate que hemos perdido anteriormente.
A lo largo de la aventura conseguimos runas que nos sirven para forjar armas, escudos y armaduras que contienen espacios especiales para ellas, teniendo que encontrar a la persona adecuada para romper su sello. También tienen otros usos como abrir cofres con jugosas recompensas.
Junto a todo esto hay portales que nos llevan hasta el reino demoniaco y que contienen los objetos más valiosos, aunque son las más complicados de superar. Aquí encontramos una pequeña luz que nos hace de guía para superar dicha zona.
Los enemigos son muy variados y sus estilos de lucha están bien diferenciados, haciendo que tengamos que aprendernos sus patrones de ataque si no queremos morir. Los jefes más poderosos son los Carceleros, que cuentan con varias porciones de vitalidad y que según avanza el combate se vuelven más fuertes y varían su patrón de ataques.
La dificultad del título es bastante alta, sólo apta para los más expertos, siendo recompensados cuanto mejor lo hacemos. Por poner un ejemplo, si acabamos con uno de los jefes sin recibir ni un solo golpe obtendremos su arma característica, aunque esto no es nada sencillo.
El título no es muy extenso, pudiendo completarse en unas 20 horas dependiendo de nuestra habilidad, pero se puede alargar su duración al visitar zonas que eran inaccesibles al comienzo de la aventura. Además, tras completarlo, se desbloquea la nueva partida +, donde podemos elegir una clase diferente y añadir un segundo árbol de hechizos.
Sus escenarios tienen diseños muy llamativos, pero técnicamente es muy mejorable en varios aspectos, encontrando incluso pequeñas ralentizaciones que pueden resultar molestas en ocasiones. Los personajes y enemigos están bien modelados y animados, aunque no tienen nada destacable.
La banda sonora es bastante buena, y las voces en inglés están muy conseguidas, teniendo efectos de sonidos que ambientan muy bien la aventura. Además cuenta con subtítulos en castellano para poder seguir su argumento.
En conclusión, Lords of the Fallen es un título muy entretenido a nivel jugable, con diferentes estilos que se adaptan a todo tipo de jugadores. Su elevada dificultad hace que sólo sea apto para los jugadores más tenaces, pero puede ser superado teniendo paciencia. Aunque no es muy duradero, los grandes escenarios y sus secretos, junto con la nueva partida + tras completar la aventura, hacen que se alargue un poco más.
Su apartado gráfico es muy mejorable técnicamente, pero a nivel artístico sus escenarios son muy bellos, destacando sobre todo los exteriores. En el sonoro encontramos temas, voces y efectos bien conseguidos, aunque no destacan demasiado.
Si os gustó la saga Dark Souls, Lords of the Fallen se le asemeja bastante, aunque tiene muchos elementos a mejorar para alcanzar a la franquicia de From Software.