Vídeo análisis de The Walking Dead Season One (GOTY Edition)
De la mano de BadLand Games y Telltale Games nos llega en formato físico The Walking Dead: Season One GOTY, que reúne los cinco capítulos lanzados digitalmente junto con el contenido descargable 400 días.


Su historia se desarrolla en el mismo universo que los cómics creados por Robert Kirkman. Aquí nos ponemos en la piel de Lee Everett, un criminal convicto al que se le ha dado la segunda oportunidad de vivir en un mundo devastado por los muertos vivientes. Entre los cadáveres que vuelven a la vida y supervivientes movidos por su propia seguridad protegeremos a una niña llamada Clementine, que quizás pueda traer la redención a un mundo que se ha ido al infierno.
Jugablemente nos encontramos ante una aventura gráfica, un título en el que nuestras acciones y elecciones afectan a cómo se desarrolla la historia a través de toda la saga. Estas decisiones son muy profundas y duraderas, acompañándonos a lo largo de todos los episodios. En ocasiones nos vemos forzados a tomar una decisión que no sólo es difícil, sino que tenemos que escogerla rápidamente ya que los no-muertos están rondando cerca.
El transcurso de la historia nos obliga a elegir quién vive y quién muere, haciendo el juego un seguimiento de nuestras decisiones para ofrecer una experiencia jugable a medida. Tras cada elección podemos ver qué porcentaje de jugadores han seleccionado una u otra, pudiendo hacernos una idea del rumbo que ha seguido la mayoría.
No todas las decisiones son tan trascendentales, encontrando pequeñas elecciones en los diálogos que apenas afectan al desarrollo. De hecho, al rejugar los capítulos nos damos cuenta de que las decisiones que parecen importantes no lo son siempre, siguiendo un camino que no se bifurca en exceso del que tomamos con anterioridad.
Podemos desplazarnos libremente por sus escenarios para buscar nuevas pistas, interaccionar con objetos o hablar con el resto de personajes desde una perspectiva en tercera persona. También hay pequeños puzles, aunque su dificultad suele ser bastante escasa.
De vez en cuando se inician quick time events, en los que debemos pulsar rápidamente los botones o la dirección que se nos indican en pantalla para evitar la muerte, aunque no son nada complicados y no afectan al desarrollo de la historia. Si fallamos comenzaremos desde el inicio de ese QTE, por lo que se convierte en un mero adorno jugable para dar más variedad a la aventura.
Junto a los cinco capítulos de la primera temporada en esta nueva versión se incluye el contenido descargable 400 días, que nos sirve como nexo de unión entre la primera temporada y la segunda. A diferencia del resto de capítulos, aquí contamos con cinco historias, cada una protagonizada por un superviviente diferente, obteniendo distintos puntos de vista de una misma situación. Estas historias pueden jugarse en el orden en que deseemos, aunque su duración es bastante escasa y apenas nos permite vincularnos con sus protagonistas, haciendo que sea más sencillo tomar ciertas decisiones.
En su apartado gráfico no notamos un salto apreciable en las consolas de nueva generación, siendo en general técnicamente bastante pobre y donde destacan sobre todo los personajes en cell-shading y sus animaciones. Su resolución si se ha aumentado, mostrándose todo bastante más definido, aunque no es nada que no se haya visto en la versión de PC.
Sus voces siguen llegando en inglés, aunque gozan de una gran calidad, con unos subtítulos en español latino que utilizan expresiones diferentes a las vistas en nuestra región y errores notables en su traducción que ya se vieron en las anteriores versiones, no habiéndose molestado en corregirlos.
A pesar de los errores en su traducción, que pueden inducir a error en ciertas ocasiones, The Walking Dead Temporada 1 GOTY sigue siendo tan bueno como su anterior versión, con una historia muy interesante que es guiada por nuestras decisiones y una jugabilidad muy acertada para una aventura gráfica. Además incluye de serie el capítulo 400 Días, que nos sirve de unión entre las dos primeras temporadas.
Gráficamente sólo se ha mejorado la resolución, mostrándose muy simple y sin encontrar cambios destacables en el resto del juego. El doblaje es muy bueno, al igual que su banda sonora y efectos, aunque los subtítulos son muy mejorables.
Un título muy interesante y divertido para aquellos que no lo hayan probado, aunque no cuenta con suficientes alicientes como para volver a ser adquirido si ya se jugó con anterioridad.